* La mamá de la víctima señaló que hay inconsistencias en el caso y que la joven le contó que sufría acoso por parte de sus compañeros y un superior
Infobae
La madre de la soldado Ana Fernanda Basaldua Ruiz de 21 años, nacida en México, señaló que antes de morir fue acosada sexualmente por sus compañeros y particularmente por un hombre de origen puertorriqueño. Exigió que haya transparencia en el caso y que se haga justicia.
“Me dijo: ‘mamá, todo el mundo quiere que me acueste con ellos, pero están bien pend**jos”. La mujer dijo que notó a su hija triste porque le “pasaban cosas muy fuertes”, las cuales aún no podía contarle y esperaba verla pronto para por fin decirle.
Antes de los 18 años de edad, Ana Fernanda decidió mudarse a Estados Unidos con su padre, un ciudadano estadounidense que años antes se había casado con su madre, una mexicana, en el municipio de Tacámbaro, Michoacán.
Cuando se quedó con su papá consiguió poner en orden sus papeles para que le dieran la nacionalidad. Posteriormente, decidió unirse a las filas del Ejército estadounidense, en donde estaba por cumplir tres años de servicio; sin embargo, fue víctima de acoso sexual, después desapareció y finalmente fue hallada sin vida.
La señora Eulalia señaló que su hija estaba concentrada en el campo militar Fort Hood, en Killeen, Texas, donde se desarrollaba como ingeniera de combate. De acuerdo con el medio Dallas News, en dicha unidad se han registrado homicidios, suicidios y agresiones sexuales en las tropas durante los últimos años.
El asesinato que el Ejército de EEUU no pudo ocultar
Y es que en 2020 la soldado Vanessa Guillén, de la misma base militar, fue reportada como desaparecida y luego encontrada muerta. Trascendió que fue asesinada a martillazos por un compañero, quien posteriormente la descuartizó y enterró en un lugar lejano al campo.
Aaron Robinson, supuesto asesino de Guillén, tenía 20 años cuando se suicidó en el momento en que la policía iba a interrogarlo tras encontrar los restos de la joven a casi dos meses de su desaparición. Su entonces pareja, Cecily Ann Aguilar, fue acusada de complicidad por haber ayudado a esconder los restos de la víctima cerca de un río de en Killeen, Texas.
La madre de la víctima lamentó que a varios días de que se localizó el cuerpo sin vida de su hija, la milicia sigue sin darles información precisa sobre cómo murió.
“La primera vez que nos dijeron algo, fue que la habían encontrado tirada y que cuando la llevaron a enfermería, pues ya no había nada que hacer que había fallecido”.
Posteriormente, cuando hablaron con el sargento encargado de Ana Fernanda, Patrick Sullivan, les dijo que la joven se había suicidado y que había usado una cuerda para lograr su cometido. No obstante, la madre duda de esa versión, pues no cree que la joven pudiera haberse quitado la vida.
Acusó que los responsables de la milicia no les han enviado pruebas como fotografías, videos, ni nada sobre el caso, pues lo único que han sabido se los han dicho de manera verbal.
“Dicen que están investigando, pero no nos dan gran detalle. Yo les pido de la manera más amorosa, de la manera más humana, que esclarezcan todas nuestras dudas y que nos presenten pruebas y todo acerca de lo que le sucedió a mi hija”, dijo para El Universal.
El Ejército de Estados Unidos, dijo por su parte, que estaban en comunicación con los deudos, a quienes les habían informado sobre el deceso y les estaban proporcionando ayuda psicológica.
“Estamos profundamente entristecidos por la pérdida irreparable de la soldado y hacemos llegar nuestras condolencias a su padre, madre y hermano”
Por el momento, la mamá de la soldado solicitó una visa humanitaria para poder recoger el cuerpo de su hija, regresar con ella a México y darle santa sepultura en un panteón de Tacámbaro, de donde es originaria.