* La situación se dio este fin de semana durante una presentación en la ciudad de Phoenix, Arizona
La gira “Perrísimas” protagonizada por Paulina Rubio y Alejandra Guzmán volvió a dar de qué hablar en las últimas horas, luego de que “La Chica dorada” parara abruptamente uno de sus conciertos en Phoenix, Arizona, para acusar, frente al público, a un guardia de seguridad que se encontraban en el lugar de haberla tocado indebidamente.
La situación se dio este fin de semana cuando Rubio, en un momento de la noche, decidió subir al escenario para cantar con su público el tema “Nena”, que hizo a dueto con Miguel Bosé; sin embargo, y entre todo el caos que se formó, la cantante interrumpió la música para denunciar la presunta agresión de la que había sido víctima por parte de un guardia.
“Paren la música, paren la música”, dijo en inglés, para después dirigirse directamente al hombre, que estaba en uno de los laterales del escenario. “Señor, usted me tocó. Usted me tocó y eso está mal porque es la seguridad. Qué pena por usted. Él me tocó y es guardia de seguridad. No es mi novio”, se la escuchar decir cuando detiene su presentación.
El insólito hecho fue grabado por el público con sus móviles. Los videos fueron publicados en diferentes redes sociales. El abucheo de los asistentes se hizo escuchar y luego de unos momentos Rubio continuó con su presentación.
Hasta el momento no se sabe si la intérprete mexicana de “Ni una sola palabra” o alguien de su equipo de trabajo haya tomado acciones legales contra el guardia acusado.
En un principio se creía que las cosas no terminarían bien, pues durante el arranque de la gira varios videos mostraban la poca química que existía entre ellas, al grado de que se ignoraban en el escenario; algo que ha ido cambiando con el paso de las presentaciones.
Las artistas prometieron que en la gira “Perrísimas”, que las llevará por más de 20 ciudades de Estados Unidos, dejarán atrás sus egos e histórica rivalidad y los transformarán en la energía que ha caracterizado sus carreras. “Nos detonamos nada más vernos, tenemos mucha fuerza y nos compenetramos”, dijo Paulina Rubio en la presentación del tour por los Estados Unidos en el Hard Rock Hotel, de Hollywood, en febrero. Porque, como aseguró la llamada “Chica Dorada”, ya tienen cierta edad, Paulina tiene 50 años y Alejandra Guzmán, 54, y ya son “grandes” como para no darse cuenta de que “el ego es el oponente”.
Las dos estrellas han protagonizado sonoros enfrentamientos que llegaron incluso a hacerse música en “Mío” y “Hey Güera”, canciones resultado del triángulo amoroso entre las dos mexicanas y el también músico y actor Erik Rubin, que fue pareja de Guzmán y tuvo un romance con Paulina. Pero la llamada Chica Dorada aseguró que todo eso quedó atrás.