Por Rodrigo Osorio/capitalver.com
Como un balde de agua fría le cayó la noticia a Esteban Ramírez Zepeta, quien fuera Jefe de la Oficina de Gobierno en la administración de Cuitláhuac García Jiménez, la noticia que dio ayer Citlalli Hernández Mora, secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), al declarar que la renovación de las dirigencias estatales de este instituto político (como es el caso de Veracruz) será posterior a las elecciones del próximo año.
Así que, con esto, la campaña emprendida por el “Sebas” por todas las regiones de Veracruz, sólo fue un derroche de recursos del erario público y un alarde de la fuerza que no tiene.
Fue a través de un mensaje difundido entre la estructura de este partido a nivel nacional por medio de sus redes sociales, donde la dirigente nacional morenista indicó que se está poniendo orden “en algunos comités estatales, sobre todo porque en este momento no podemos renovar nuestros órganos internos, lo cual se podrá hacer pasando los procesos electorales”.
De esta manera Ramírez Zepeta no será ungido como dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional en Veracruz, quedándose como “el perro de las dos tortas”, no tendrá cargo en la administración estatal -su último hueso era ser Jefe de Asesores del “Cuik”- y ahora tampoco partido político que exprimir.
Cabe destacar que la senadora también informó del nombramiento de los 15 delegados en los estados donde se renovarán las gubernaturas, mientras que en los otros 17 continuará pendiente el nombramiento, indicando que un acuerdo del Comité Ejecutivo Nacional fue que ella generara una propuesta a discutir para su posible aprobación en la próxima reunión del comité.
Se espera que con esto el oriundo de Las Choapas le baje a su soberbia y se dé cuenta que la vida es una rueda de la fortuna; además, el “muchachón” creyó que yendo a besarle los pies al nuevo dirigente nacional de su partido político, Mario Delgado Carrillo, le iban a dar la posición estatal, pero le dieron dos metros de producto poblano.